La finalidad de los ventiladores parece bastante obvia: su rotación perpetua mantiene el aire en movimiento, con lo que desplaza aire frío hacia un objeto o aleja aire caliente de él. ¿Pero qué ocurre en un «ventilador PWM»? ¿Y qué lo hace diferente de su homólogo «que no es PWM»?
Los ventiladores PWM se pueden usar en cualquier parte, desde la refrigeración de la CPU y la caja o como complemento a un radiador. El control se puede realizar mediante herramientas a medida en el sistema operativo o la BIOS/UEFI o bien usando los conmutadores que hay en la parte superior de nuestras cajas. Si prefiere no ocuparse del control manualmente, también puede dejar que el sistema se encargue por sí mismo: las placas base modernas funcionan en un margen de especificaciones seguras que refrigerarán su ordenador de forma fiable en todo momento.